La Paz ni se regala, ni es fácil mantenerla. Y nuestro mundo es muy pequeño, incluso para la ambición de un solo hombre. El pasado siglo, padeció dos guerras mundiales, con centenares de muertos y el empobrecimiento, de miles de millones de personas. Hasta ayer, Afganistán, era un muro de contención, que roto, resulta y resultará, muy lesivo para las democracias.
El país más extenso del mundo, Rusia, con sus más de 17 millones de kilómetros cuadrados, limita con Noruega, Finlandia, Estonia, Letonia, Lituania, Polonia, +Bielorusia, +Ucrania, Georgia… Desde el Océano Pacífico hasta Ucrania (sus fronteras de 1.200 klms.), hay una distancia de 10.000 kilómetros. De la enorme y despoblada Siberia, prácticamente sin vecinos, salvo China, pasamos a la Rusia europea, que por el Azov (mar de solo 37.555 kms. cuadradados y una profundidad de 13 metros), se comunica con el mar Negro y éste, a través de los Dardanelos, con el Mediterráneo. En 2014, Rusia se apodera de la península de Crimea, en el mar Negro, preámbulo del ataque e invasión de Ucrania, ayer. Previsibles y no detectados, los movimientos de Putin, amenazando, durante meses, lugares determinados, para luego atacar todo el territorio de Ucrania.
En Asia, había tres puntos de posibles conflictos: Hong Kong (ya chino), Taiwán y Corea del Sur.
Y nos queda, África, tan necesitada y destrozada y que será en un futuro próximo, exportadora de conflictos. El abandono de las tropas francesas, que se está produciendo en este mismo año, y la llegada de Rusia y China, a los desestabilizados países del Sahel, están provocando ya importantes movimientos migratorios hacia las Islas Canarias.
Marruecos independizado en 1956, invadió el territorio de Ifni y después de una corta guerra, España, se retira definitivamente del lugar, en 1969. En 1976, siguiendo su expansión hacia el sur con la marcha verde se anexiona el Sáhara occidental español que baja hasta Mauritania y Malí. Malí, está a tiro de piedra de las Islas Canarias. Marruecos las vigila a menos de 100 kilómetros, desde Tarfaya.
Si quieres la Paz, prepara la guerra. Aunque no la hagas, no dudes, que otros la harán por ti.
Y llorando por el noble y valeroso pueblo de Ucrania.
Antonio Olmedo Manzanares.