Ya se levanta el Sol más tarde. Desde mi atalaya, he visto, como día a día, iba desplazándose hacia la izquierda, hasta casi intentar salir, tras la torre de la Iglesia. Hoy no, hoy, una ligera neblina, no le ha dejado mostrarse, y caía blanda sobre los tejados, cobijando cada uno, el afán particular de una familia.
Arriba, más a la izquierda, los ojos despiertos de los molinos, se asomaban como siempre, a su pueblo, mostrando sus poderosos brazos desnudos.
Hoy es Domingo y en principio, enmudecieron las lenguas de las campanas, llamando a Misa, aunque, a veces, suenan de manera lastimera, no sé si a difuntos, ignoro, si es solo de pesar. El carillón del Ayuntamiento, si sigue, disciplinado, marcando todas las horas.
No creo, que este maldito virus, toque ninguna puerta de este pueblo, sencillo y fuerte pero, mientras tanto, en casa, con Salud y buenos alimentos, que la Primavera, llegará pronto, y por nuestra esperanza, será más saludable que nunca.
Antonio Olmedo Manzanares.