De 1769 a 1772, año en el que fue socorrida por el Rey, con 40.000 pesos y 2 barcos de trigo, se prolongó una hambruna, que asoló Fuerteventura, matando a muchos majoreros, mientras otros muchos, “desembarcaban como langosta, en los puertos de Canaria, Tenerife, Palma y aún del Hierro. Era objeto que hacía gemir ver tantas personas mal vestidas, mendigando a veces el pan por las calles, plazas e Iglesias”.
Tan solo es un triste episodio de hambre y penurias, que ya ocurrió también, en 1683 y 84, e incluso, en épocas más recientes, desde 1832 a 1846, cuando la isla perdió la mitad de su población.
Y, en medio de todo, un pueblo sin memoria. Viera y Clavijo recuerda, que Fuerteventura, suele producir, en un buen año, 300.000 fanegas de excelente trigo, sin contar el maíz y la cebada y eso contando que apenas cultivan la mitad de los campos.
En 1776, da cuenta de los habitantes del Archipiélago y lo que se recolectaba de grano, en fanegas:
Población Trigo Cebada
Tenerife 62.952 104.240 21.900
Gran Canaria 41.841 65.550 75.230
La Palma 20.108 22.000 18.700
Fuerteventura 8.467 61.080 140.620
Lanzarote 7.836 22.660 54.110
La Gomera 6.789 7.950 11.050
El Hierro 4.037 350 9.530
Fuerteventura, es un país pingüe y es el principal granero de Canarias, pero no hace depósito de grano en los años buenos”.
Ya, en 1721, Gran Canaria, acuerda no admitir a los conejeros y majoreros llegados a la isla, después de superar éstos, los tres mil.
Fuerteventura al 30-04-2015 tiene 43.716 Plazas hoteleras. En el año anterior, 47.227; 17.740 Plazas Aptos. y 20.461.
Ingresos 1T 2015 42.2 millones € frente al año anterior 44,00 millones de euros.
Y predican el crecimiento del turismo, con la casi eliminación, de éste, en Oriente Medio, la bajada de los combustibles y, dicen, la salida de la crisis. La cruda realidad, es que hemos perdido camas y las que quedan, son más viejas. La tozuda realidad es que, con un enorme caudal de posibilidades, nos vamos durmiendo y empobreciendo, como ocurriera, hace 200 años.
“Hay muchos lugares, a lo largo de la geografía majorera, situados en lugares privilegiados, convertidos en guetos. El más emblemático sin duda, Stella Canaris, 4.200 camas en 9 clases de alojamientos distintos: Villas, Chalets, Hotel El Palmeral, Vistamar, tres pabellones de apartamentos, Monteverde, Etc… plantados en casi un millón de metros cuadrados, con 12.000 palmeras y calles públicas, convertidas en privadas. Un sitio que ha ido degenerando día a día, con el olvido, cuando no desatención, del Ayuntamiento de Pájara, mientras otros se enriquecían, evadiendo impuestos y condenando al paro, a más de 300 personas. En la actualidad, las 4.200 camas se han convertido en un pequeño poblado de chabolas en ruinas, y cobijo, de gentes sin techo.
“Solamente me bastó ir una vez, para saber que no volvería a este hotel. Una villa que la pintan de ensueño , y al final, sucia, llena de cucarachas como leños gigantes, de humedad, mosquitos por todos lados, que me hacían un daño horrible y me tuve que salir del hotel no sé ni cuantas veces del desespero,. La atención… Más”
“De lo que fuera este complejo ya no queda nada; Ni animación, ni mantenimiento, ni limpieza, ningún servicio en las villas donde nos alojamos ni en las zonas comunes, ni cambio de sabanas ni toallas, ni agua caliente, solo suciedad, cucarachas, mosquitos y excrementos de los pavos, gatos y puercoespines que hay sueltos por todo el complejo. Aunque nos informaron de que…”
Copia literal de alguno de los muchos comentarios de Clientes de Stella. (Y quieren turismo de calidad).
Hoy, seis años después, seguimos así, pero saliendo del Covid-19.
Antonio Olmedo Manzanares.